No tengo leche suficiente

Noticia publicada el 13-06-2018

Una de las mayores preocupaciones que tenemos cuando somos mamás que damos pecho es saber cuánta leche les estamos dando a nuestros bebés, nos preguntamos: “¿Lo estaré satisfaciendo?, ¿comerá suficiente?, ¿estaré produciendo menos?”...

La forma que encontramos para medir nuestra producción es súper lógica. Nos decimos: “¡claro! obvio que con el extractor de leche voy a saber cuánta leche tengo, me sacaré leche hasta que deje de salir y así sabré cuánto está tomando”. O lo que es peor, una vez explicada la duda al pediatra, te dirá que lo hagas: “señora, si tiene dudas acerca de la cantidad de leche que produce, no tiene más que verificarlo con un extractor”

¡Detente!

Esta práctica es un error garrafal y además es el primer peldaño de la desesperación en la que entrarás cuando quizás saques poquito, pero... ¿por qué usar el sacaleches para saber cuánta leche produces no tiene ningún sentido?

1- Porque el sacaleches no es fiable para medir, es una herramienta que sirve muchísimo para las mamis que, por el motivo que sea, necesitan salir y dejar a sus bebés bajo el cuidado de alguna persona de confianza y poco a poco hacen su banco de leche, pero no para medir la producción.

2- Sacarse la leche con un extractor es un acto que puede llegar a requerir de mucha práctica. Son muchas las mujeres que me he encontrado en la consulta diciéndome que su hijo no comía lo suficiente porque con el sacaleches apenas se sacaba 10 ó 20 ml. Y la pareja insistiendo que deberían darle un complemento porque no produce lo suficiente.

3- Sin embargo, basta con poner al niño en la báscula para conocer la realidad: si gana peso bien, es imposible que esté comiendo solo 10 ó 20 ml. por toma, así que algo no cuadra ¿Qué es lo que no cuadra? Pues eso, que hay mujeres que enseguida sacan un montón y hay otras que no, porque un sacaleches no es igual a tú bebé, y porque a veces no se utiliza del todo bien y se empieza con demasiada fuerza de succión o la copa que se utiliza no es del diámetro adecuado (además, es un arte... tienes que cogerle el truco).

4- Recuerda que la eyección de la leche depende de la oxitocina (hormona que hace que la leche salga de la glándula). Dar el pecho es un acto de amor, de cuidado, y cuando una madre coge a su bebé para amamantarlo, solo por el cariño que le tiene, empieza a segregar oxitocina. La oxitocina es la hormona del amor, la que se segrega cuando estamos en buena compañía, cuando nos enamoramos, cuando hacemos el amor y también cuando amamantamos a nuestro bebé.

 

No tiene sentido sacarse cuatro gotas con el sacaleches y pensar que eso es lo que tu bebé está comiendo si su peso está bien.



Si el momento es bonito, de cariño, de amor, saldrá más leche que si el momento es frío, mecánico, sin todo el componente emocional, como puede ser ponerse un sacaleches en el pecho y darle al “ON” mientras miramos al móvil o al reloj.

Por eso, a muchas mujeres, cuando tienen que sacarse leche para dejarle a su bebé al reincorporarse al trabajo, les recomiendan que lo hagan mientras su bebé mama del otro pecho o, si el bebé no está, que lo hagan mirando alguna foto, oliendo una prenda suya o pensando en él. Para que la oxitocina ayude a desencadenar la salida de la leche.



Y entonces, ¿cómo sé si produzco la leche suficiente?

1- Por el peso, ¿tu bebé está aumentando bien de peso?*

2- Porque das pecho a libre demanda y tus pechos están blandos después de alimentar al bebé.

3-  Por la frecuencia en que moja pañales con orina, y por el popo.*

 

*¿Cuánto peso debe ir ganando?

Durante los primeros cinco días de vida, muchos bebés pueden llegar a perder entre el 7 y el 10% del peso que tenían al nacer.  Los bebés nacen con reservas de grasa y generalmente recuperan el peso al cumplir dos semanas de vida. La alimentación frecuente y durante todo el día (a demanda) ayudará a prevenir una pérdida de peso importante.

 

*¿Cómo y cuántas deben ser las deposiciones?

Si el bebé está recibiendo leche materna suficiente hará caca frecuentemente. Por lo general, las deposiciones son blandas y pasan de un color negro a marrón y a amarillo mostaza en los primeros cinco días.  El ritmo intestinal de los bebés que se alimentan con leche materna es variable, pero al tercer día de vida, por lo general, harán como mínimo entre 2 y 3 deposiciones al día, y a los cinco días de vida, cuatro. Luego esto varía, algunos bebés hacen caca todos los días, mientras que otros lo hacen cada varios días.

*¿Y el pipí?

La orina tiene un color pálido. Tambien existe un patrón de pañales mojados. El primer día mojará un pañal, el segundo día dos... y a partir del sexto día de vida mojará entre 6 y 8 pañales al día (una vez que aumente su producción de leche, la orina empapará el pañal).



Así que ya sabes, el extractor es tu aliado. No lo vuelvas tu enemigo utilizándolo para lo que no sirve.•

Fiorella Guzmán Vela
Matrona
Especialista en preparación prenatal y posnatal
Consejera en lactancia materna
Facebook Mami Obstetra

Volver